El diputado francés, que el pasado viernes ofreció una conferencia en el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), promovió en su país la normativa conocida como "ley Bataille", que autoriza distintas líneas de investigación para determinar el modelo definitivo de gestión de residuos de alta actividad procedentes de las centrales nucleares.

En el 2006, el Parlamento francés estudiará los resultadosde estas investigaciones, con el asesoramiento de un comité de expertos del que forma parte el presidente del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) de España, Juan Manuel Kindelán.

Bataille señaló que probablemente en el futuro se optará por la combinación de varios sistemas para gestionar los desechos nucleares, alternando el almacenamiento en formaciones geológicas y la transmutación de residuos para reducir su actividad y, de esta forma, su peligrosidad.

El parlamentario francés indicó que en su aís el consenso que motivó la aprobación de la ley no fue total, pero logró el apoyo de la conservadora Unión por la República (RPR) y de los socialistas.

Christian Bataille señaló que este acuerdo es fundamental para garantizar la estabilidad de la política nuclear ante la alternancia de gobiernos de distinta ideología.

Al contrario de lo ocurrido en Francia, en España los dos partidos mayoritarios no han alcanzado un acuerdo en esta materia. Está pendiente la aprobación de un nuevo Plan Naciona de Residuos Radiactivos y el Senado ha fracasado en su intento de marcar las pautas que deben influir en la gestión de estos desechos, ante las diferencias que existen entre el PP y el PSOE.