En virtud de este informe, elaborado por el Observatorio Estatal de Violencia sobre la Mujer y conocido hoy por el Consejo de Ministros, el año pasado aumentaron también en un 35% las intervenciones policiales directas debido, en muchos casos, a llamadas de vecinos (35,9 por 100) y a través de los partes de lesiones (24,1 por 100).

Pese al incremento de las denuncias, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, afirmó en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que "para el Ejecutivo, no caben ni triunfalismos ni complacencias", por lo que apeló a la colaboración de todos para luchar contra los malos tratos.

De la Vega lamentó también que el informe ponga de manifiesto que la sensibilidad hacia la violencia de género sigue siendo "baja" en la sociedad, donde persisten todavía "unas diferencias importantes entre lo que perciben los hombres y las mujeres ante una misma realidad".

En el análisis estadístico del trabajo se constata también una disminución progresiva de los casos de homicidio en los que existía denuncia previa u orden de protección en vigor.

Por otra parte, en una segunda parte, el informe se hace eco de un estudio cualitativo sobre la discapacidad sobrevenida como consecuencia de la violencia de género a través de las "historias de vida" de nueve mujeres víctimas de malos tratos.