García Ruíz declaró a Servimedia que en estas tres capillas, situadas en la T-1, T-2 y T-4, "está Dios para todos, no para un grupo de personas, sino para una comunidad universal".

"Aquí te encuentras a gente de todos los colores y de todos los países rezando y emociona ver a gente de África y de Asia que quieren a Jesús como nosotros", apostilló.

El sacerdote destacó que "el golpe que ha ocurrido ha movido a más gente a acudir a las capillas", lo que provoca que "casi continuamente hay gente rezando en las tres capillas que hay en el aeropuerto".

El sacerdote comentó que desde el accidente de Spanair del pasado 20 de agosto reza por las víctimas de esta tragedia en la misa diaria que se celebra en alguna de las tres capillas y que, según lamentó, la megafonía de Aena ha dejado de anunciar.

García Ruíz también comentó que cada día se acuerda de los trabajadores de Spanair, porque el accidente, "ha sido un golpe muy fuerte y azafatas y pilotos son víctimas de ataques injustos".

"El Señor lo tenemos aquí con el deseo de que acompañe y sirva como un poco de ayuda a todos los que vuelan", remachó.

Por otro lado, García Ruíz dijo que ha visitado a los familiares de las víctimas y que el clima es de "dolor más sereno", porque muchos de ellos han podido recuperar los cadáveres para darles sepultura.

Finalmente, el sacerdote comentó que acudió al lugar del siniestro poco después de producirse y que recuerda los "cadáveres carbonizados".

"En medio de todo eso, los bomberos trabajaron con entereza y con mucho respeto, dolor y diligencia; y también los policías, la Guardia Civil y empleados del aeropuerto lo estaban haciendo muy bien", aseveró.