LA AUDIENCIA NACIONAL JUZGARA ESTA SEMANA A DOS PERSONAS POR UN ATENTADO EN LOGROÑO
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La Sección Cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional juzgará mañana lunes, día 23, a Premín Sampedro Larrañaga y a Jesús María Goicoechea Garralda por el atentado perpetrado por ETA el 10 de junio de 2001 en el edificio denominado "La Torre de Logroño", ubicado en la ciudad del mismo nombre.
La Fiscalía de la Audiencia Nacional solicita que cada uno de los dos acusados sea condenado a 108 años de cárcel por delitos de estragos, falsificación de documento oficial, asesinato terrorista en grado de tentativa y lesiones.
Según el escrito de conclusiones provisionales, el fiscal considera probado que Premín Sampedro y Jesús María Goicoechea formaban parte del "comando Xoxua" de ETA, dirigido desde Francia por Ainhoa Múgica Goñi, alias "Olatz".
Entre los cometidos encomendados por "Olatz" a Sampedro y a Goicoechea se encontraba recabar información sobre posibles lugares, en localidades cercanas al País Vasco, para la colocación de bombas.
Así, los dos acusados recopilaron información de la localidad de Logroño, donde seleccionaron tres posibles lugares para atentar: Banco de España y los edificios de Telefónica y "La Torre de Logroño".
Tras conseguir el coche de un conocido, un turismo Peugeot 306, Premín Sampedro y Jesús María Goicoechea se dirigieron, el 9 de junio de 2001, a la localidad francesa de Guetary, donde "Olatz" les entregó un Fiat Tempra cargado con un artefacto explosivo que tenían que colocar frente al edificio "La Torre de Logroño".
Jesús María Goicoechea condujo a España el Fiat Tempra, precedido por Premín Sampedro, que iba en el Peugeot 306. Posteriormente cambiaron las placas de matrícula al coche bomba.
En las últimas horas de la tarde del 9 de junio de 2001, los acusados estacionaron el Fiat Tempra frente al edificio "La Torre de Logroño", preparando el mecanismo de activación del artefacto explosivo para que explotara a las 6,30 horas del 10 de junio de 2001.
Ese mismo día, 10 de junio, a las 5,45 horas, se recibió una llamada telefónica en SOS-Rioja avisando de la colocación del coche-bomba. Sobre la misma hora se realizaron dos llamadas similares más a la Ertzaintza y a la central de la asociación DYA.
Las tres llamadas fueron comunicadas a la Sala de Operaciones del 091 de la Jefatura Superior de Policía de la Rioja, que inmediatamente alertó a las dotaciones policiales para la localización del vehículo, que se halló a las 6,10 horas.
Ante el poco tiempo que faltaba para la explosión, la policía decidió no intentar evacuar los edificios, tomando las medidas de seguridad pertinentes. El coche-bomba estalló a la hora indicada, causando daños por valor de 189.870,04 euros y causando lesiones a siete personas.
(SERVIMEDIA)
22 Mayo 2005
VBR