El fiscal encargado del caso, Miguel Ángel Carballo, acusa a González Rodríguez de un delito de estragos de carácter terrorista en grado de tentativa y pide para él ocho años de cárcel y 15 de inhabilitación absoluta.

El acusado fue detenido el 13 de septiembre de 2005 en las inmediaciones de la sede del PSOE en Infiesto cuando supuestamente se disponía a colocar en el citado edificio un artefacto explosivo compuesto por una garrafa de gasolina, un aerosol, dos petardos y dos mechas de activación.

En el momento de su arresto, González Rodríguez había iniciado la ignición del artefacto, por lo que los agentes de la Policía se vieron obligados a apagar las mechas.

Además, los agentes incautaron al acusado una octavilla en la que se podía leer en bable "viva Asturias independiente, viva Asturias socialista y viva la república popular asturiana".

El informe de la Fiscalía señala que el acusado está relacionado "con el nacionalismo asturiano de extrema izquierda independentista radical y con el mismo independentismo violento radical del País Vasco".