El comisario-jefe había elaborado unas "Instrucciones de control interior" de la Audiencia Nacional que obligaban a los periodistas a permanecer en la planta baja del edificio y les prohibí estar en descansillos y escaleras, donde deben desarrollar su trabajo, dado que carecen de sala de prensa, alegando que era contrario a la normativa de evacuación en supuestos de incendio o amenaza de bomba.

Asímismo, había establecido que los informadores no podían permanecer en las plantas del edificio, donde se encuentran los juzgados y secretarías, teniendo que solicitar autorización a un funcionario de seguridad para entrevistarse con las personas que allí trabajan, con lo que les impedía el libe acceso a las fuentes de información.

Tras conocer dichas normas, los periodistas de tribunales protagonizaron una protesta el pasado miércoles y remitieron un escrito a la Sala de Gobierno de la Audiencia Nacional, solicitando su amparo frente a "unas desmesuradas" normas que, a su juicio, son "gravemente lesivas contra el derecho a la libertad de información y de las que se desprende, cuando menos, la intención de 'hacer limpieza' de periodistas que cubren la información en esa audiencia".

El scrito de los periodistas fue estudiado ayer por la Sala de Gobierno que decidió revocar parcialmente las normas establecidas por el comisario de seguridad, acordando que los "periodistas acreditados pueden utilizar libremente los espacios de circulación del edificio y permanecer en los diferentes vestíbulos y antesalas sin otro requisito que el de su registro a la entrada de la audiencia".

Además, el órgano de Gobierno de la Audiencia Nacional, tras considerar que el plan de seguridad no limita el ejrcicio del derecho a la información, decidió, "para el mejor ejercicio de ese derecho", habilitar unas dependencias para su uso exclusivo por los informadores en la planta baja del edificio.