Según consta en la sentencia, los magistrados consideran probado que en los primeros meses de 1992 Gabriele Emile Kanze conoció en Barcelona a Benjamín Ramos Vega, quien realizaba puntuales actos de apoyo a los miembros del "comando Barcelona".

A petición de Benjamín Ramos, con quien llegó a casarse, Gabriele Kanze accedió a alquilar un piso en Barcelona, "a sabiendas de que sería ocupado por personas que integraban ese comando".

Gabriele Emile Kanze firmó el contrato de alquiler el 4 de agosto de 1993 y le dijo a la arrendadora que el piso no sería ocupado por ella, sino por profesores de idiomas compañeros suyos.

Un mes más tarde, en septiembre, Gabriele Emile Kanze regresó a Alemania, "dejando el uso de dicha vivienda a los miembros del 'comando Barcelona' de la banda ETA y domiciliando el pago de las rentas correspondientes en una cuenta corriente bancaria" a nombre suyo.

En abril de 1994 fue detenido en Barcelona Felipe San Epifanio San Pedro, quien habitaba un piso arrendado a nombre de la pareja de Gabriele Emile Kanze, Benjamín Ramos Vega.

El piso en el que vivía Felipe San Epifanio estaba situado enfrente del piso que Gabriele Emile Kanze alquiló para el "comando Barcelona".

Para los magistrados, los hechos descritos son constitutivos de un delito de colaboración con banda armada, del que es responsable Gabriele Emile Kanze, a la que condenan a dos años y ocho meses de prisión y a una multa de nueve meses, a razón de seis euros diarios.