Atutxa reconoció que esta práctica influye negativamente en la imagen de la policía autonómica y entiende el daño ocasionado a la sensibilidad pública por la difusión de las imágenes que contenían estas prácticas.

La iniciativa de prohibir dichas prácticas partió del Grupo Parlamentario Popular, quien se mostró satisfecho con las explicaciones del consejero y ha retirado ya su propuesta.

Atutxa confirmó que se realizaron prácticas de tiro con 12 cabras a lo largo de 16 aos, teniendo como objeto principal el estudio de los efectos de las balas en los cuerpos de los animales. Asimismo, también confirmó que las prácticas se grababan en vídeo.