"Puede considerarse como normal el que todavía no se haya producido ningún contacto porque cada vez se hace más difícil el establecer contactos, porque algunos de quienes actuaban con cierta impunidad en su relación de intermediación a lo largo de los últimos tiempos han pasado verdaderos aprietos ante la Justicia y por lo tanto se cuenta cada vez con menos voluntrios para hacer de mediador", señaló Atutxa.

El consejero de Interior tampoco se ha extrañado por el hecho de que ETA no haya envíado una fotografía del secuestrado o cualquier otra prueba sobre su estado de salud, ya que en otros secuestros tampoco lo hizo.

Atutxa tildó de especulaciones las informaciones que apuntan a un rebrote de la actividad de ETA para forzar una negociación. En su opinión, la estrategia de la banda terrorista es mantener viva la alarma social.

Sobre las investigacione en torno a la muerte de Rosa Zarra, Atutxa indicó que todos los datos que se poseen son remitidos a la Fiscalía de San Sebastián. El Departamento vasco de Interior está elaborando un exhaustivo informe sobre los hechos, que será remitido al Parlamento vasco.

El consejero de Interior efectuó estas declaraciones al término de la concentración realizada como cada lunes a las puertas de la sede del Gobierno vasco, en Lakua, en demanda de la liberación de José María Aldaya.