En declaraciones a Servimedia, el vicepresidentede ATIME, Kamal Rahmouni, expresó su "enérgica y rotunda condena" a este crimen contra una persona "de más de sesenta años, que lo único que ha hecho es venirse para trabajar en Huelva, y ha sido apaleado hasta la muerte".

Por ello, reclamó a las autoridades que impulsen la investigación para "detener a los responsables y ponerlos a disposición judicial", pues se trata "de un crimen que no se puede permitir ni tolerar".

Asimismo, quiso hacer "un llamamiento a la clase política para que denuncien laramente este hecho, y asuman sus responsabilidades, especialmente el Gobierno, en el sentido de poner los medios suficientes para garantizar la seguridad de los inmigrantes que trabajan en España".

Rahmouni recalcó que, aunque sea aventurado hablar de ataque racista o xenófobo, lo que no puede admitirse es que se achaque esta paliza a un "ajuste de cuentas", pues, insistió, el grupo de inmigrantes "acababa de llegar de Almería, no conocían a nadie, no había nada que ajustar".