Según Maragall, la victoria del pueblo vasco sobre el terrorismo está cada vez más cerca y "nosotros tenemos que ayudarles a vencer la batalla del lazo azul", añadió.

El que Cataluña se ponga el lazo azul reresenta "la posilidad de ser cada uno patriota acérrimo de los suyo, de la patria chica y, al mismo tiempo, trascenderla con la amistad respecto de otras", explicó el edil barcelonés.

Asimismo, Maragall destacó el gesto del presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, que intrerrumpió sus vacaciones la noche de ayer para ir a cenar al lugar donde ocurrió el atentado.

Además, el alcalde de la Ciudad Condal elogió al delegado del Gobierno de Cataluña, Miguel Solans, que fue uno de los primeros en acuir al lugar de los hechos, a quien calificó de "hombre de enorme sensibilidad y espíritu libre".

Finalmente, Maragall dijo que "los partidos catalanes deberíamos aprender más de los vascos y ser capaces de establecer entre nosotros y frente a nuestro país una gran cultura de coalició política".