El presidente del PP de Guipúzcoa, José Eugenio Azpiroz, manifestó su solidaridad con el mundo empresarial vasco y aseguró que "el único problema para todos los vascos de buena voluntad reside en ETA y en los crímenes que comete".

Para el PSOE de Guipúzcoa, con el asesinato de Usabiaga TA "muestra como entiende la paz y el diálogo para la normalización política, poniendo cadáveres sobre la mesa".

Por su parte, Eusko Alkartasuna se pregunta si la "liberación de Euskadi pasa por la aniquilación física de los empresarios vascos, la mutilación de trabajadores portugueses y catalanes o el asesinato de cualquier ciudadano que no comulgue con la causa de aquellos cuyo único argumento es el uso de la violencia".

La patronal guipuzcoana Adegui insiste en la evidencia del objetivo final e ETA: "Sembrar la desesperanza, la desolación y la miseria en Euskadi, asesinando a un empresario, cuyo único 'delito' ha sido trabajar para su empresa". Además reafirman su voluntad de seguir al frente de sus empresas "a pesar de las extorsiones y violencias".

Para la coordinadora Denon Artean-Paz y Reconciliación, este pueblo tiene una deuda moral con personas que, como Isidro Usabiaga, han pagado con su vida la insumisión frente al fascismo y la intoleracia.

Finalmente, el obispo de San Sebasián, José María Setién, condenó el atentado de ETA "por el manifiesto desprecio hacia todo un pueblo, al que se pretende someter al ritmo cruel de sucias estrategias de muerte".