Aunque no se puede establecer un principio de "causa-efecto" entre las palabras de Arzalluz sobre el Ejército y el atentado de esta tarde contra el guardiacivil Fernando Jiménez, dijo Mayor Oreja, "lo cierto es que lo ocurrido en Bilbao pone de manifiesto lo irresponsable de esas palabras".

"Si hay alguien que debe tener un exquisito cuidado con lo que dice somos los políticos, porque los hechos suelen ser tozudos", concluyó en referencia a las palabras del dirigente peneuvista sobre el Ejército y la Constitución.

En su opinión, este nuevo asesinato vuelve a poner de triste actualidad que ETA "está ahí, frente a quienes todavía dicen que algo se muve en el entorno de la banda, empezando por el grupo Elkarri y continuando por sectores de HB".

"Podemos ver que la expresión de ese `movimiento' es la bomba y la muerte y, en general, me parece una barbaridad más de las que ya nos tienen acostumbrados", concluyó.