En el lugar de los hechos,la Plaza Virgen del Pilar, donde vivía la víctima, fueron encontrados dos casquillos de bala calibre 9 milímetros parabellum marca SBP, al igual que la bala que mató a Santamaría, según señaló el Gobierno Civil de Guipuzcoa.

Los dos proyectiles disarados hoy conta José Ramón Domínguez, hicieron blanco en la sien y la zona retroauricular izquierdas, con orificio de salida por la sien derecha y por el cuello, respectiivamente, indicaron fuentes sanitarias. Aunque los médicos durante su traslado a un cenro hospitalario, intentaron reanimarlo, Domínguez ingresó cadáver.

Testigos presenciales aseguraron que hacia las ocho de la mañana, dos individuos, vestidos con prendas oscuras, huyeron del lugar a paso ligero después de disparar al funcionario. Debido a la oscuridad, el cuerpo de José Ramón Domínguez no fue encontrado hasta un cuarto de hora después ya que se encontraba tendido entre dos coches y un seto.

La familia de la víctima, que reside en Burgos, emprendió viaje hasta la capital guipuzcoaa en cuanto conoció la noticia. Según el Gobierno Civil, la familia tenía intención de trasladar el cuerpo a su provincia natal donde sería enterrado. Durante la tarde de hoy, se le practica la autopsia en el Instituto Anatómico Forense del cementerio de Polloe.

Domínguez cumplía funciones de educador en la prisión de Martutene en San Sebastián y, según fuentes penitenciarias,tenía buenas relaciones con los presos, incluso con los 22 presos de ETA que se encuentran en esta cárcel. Pudo ser trasladado n una ocasión, pero rechazó dicho traslado ya que se encontraba a gusto con su labor en San Sebastián.

El funcionario, manifestaron fuentes del Ayuntamiento donostiarra, estaba colaborando con esta institución para impulsar programas que mejoraran las condiciones de los reclusos.

Por otra parte, la Secretaría de Asuntos Penitenciarios propondrá a Domínguez para que se le conceda la medalla de oro al mérito penitenciario.