A través de un comunicado, Elkarri envió su solidaridad a los familiares y amigos más allegados de Giménez Abad. "Además de un atentado contra la vida y contra los derechos humanos, éste es un atentado contra la política y contra el diálogo".

"Primero", argumentó, "porque se ha dirigido contra un cargo político, un interlocutor de ideas legítimas, y segundo, porque se ha producido en medio de una campaña electoral, el período e el que debe primar por encima de todo la política, la exposición de los diferentes políticos".

Con este asesinato, prosiguió Elkarri, "ETA vuelve a demostrar que no respeta lo que esta sociedad desea mayoritariamente. Esta sociedad es mayor de edad y quiere resolver sus problemas sin la tutela de la violencia".

Además de estas advertencias a la banda terrorista, Elkarri pidió a los políticos "que el dolor y la indignación por este atentado no se conviertan en arma electoral ni en argumento para gudizar la tensión y la crispación política. La mejor respuesta a la violencia, el mejor compromiso de solidaridad con las víctimas es la respuesta ética, serena y civilizada de la convivencia".