La Cámara Baja manifiesta "su más sentida repulsa" ante este nuevo atentado de ETA y señala que "esta última víctima de la barbarie terrorista resulta particularmente dolorosa para quienes, por formar parte del Congreso, también han asumido la representaciónde los ciudadanos como un compromiso personal".

"Desde este hemiciclo", continúa la declaración, "la Cámara expresa el reconocimiento a la dignidad de Manuel Zamarreño, quien a costa de su vida aceptó dar cauce al mandato democrático recibido de los electores de Rentería".

"Su vida, como la de todos aquellos que la han perdido por su decisión de servicio a los demás, clama por el cese del crimen, de la sinrazón y del horror. El Congreso de los Diputados, esta mañana, une su voz a este clamor", cocluye la declaración.