En un comunicado difundido hoy, los obispos españoles resaltan que "la violencia criminal de ETA ha causado la pasada noche la muerte de un servidor del pueblo, heridas a otros varios y numerosos destrozos materiales en Rosas y Gandía. A ETA no le importa la vida de los inocentes y el amedrentamiento de los ciudadanos con tal de imponer su voluntad".

"Con el Santo Padre", la Conferencia Episcopal Española "recuerda respecto al terrorismo que 'ninguna causa o ideología pueden justificarlo. Slo la paz construye los pueblos'. De esta doctrina se deriva para el cristiano el imperativo moral de oponerse a ETA y a cuantas personas o instituciones colaboren con ella".

La Conferencia Episcopal manifestó su "condolencia sincera a los familiares, amigos y compañeros del policía asesinado, a la población de Rosas, a la comunidad diocesana de Girona y a su pastor y a todas las gentes de buena voluntad que se sienten justamente agredidas".