Las viviendas de los miembros de la Benemerita han sido uno de los principales objetivos de la banda terrorista vasca. Los atentados con consecuencias mas graves se produjeron en Zaragoza y Vic (Barcelona), en los que perdieron la vid un total de veinte personas, de las cuales nueve eran niños.

En 11 de diciembre de 1987 se produjo uno de los más importantes atentados de ETA, al explosionar un coche-bomba contra la casa cuartel de Zaragoza en el que murieron once personas, cinco de ellas niños.

El 14 de marzo de 1988 los terroristas arrojaron un total de 10 granadas contra la casa cuartel de Llodio (Alava), de las que sólo explotaron tres. Como consecuencia de la explosión, dos guardias civiles resultaron heridos.

El 29 e mayo de 1991 en la localidad barcelonesa de Vic se producía un sangriento atentado contra la casa cuartel de dicha ciudad, en el que murieron nueve personas, entre ellas cuatro niños, y otras cincuenta resultaron heridas.

El 25 de julio de 1991, un coche-bomba, cargado con 60 kilos de amonal, explotó en la casa cuartel de Irún (Guipuzcoa), causando heridas leves a 18 personas.

El diez de febrero de 1992 ETA atentó contra la casa cuartel de la Benemerita en Murcia, en esta acción resultó muerto l policía Angel García Rabadán cuando inspeccionaban el coche-bomba aparcado en las inmediaciones del edificio.

En la madrugada del 3 de junio de 1992 hicieron explosión dos artefactos, compuestos por unos 25 kilos de amosal en los exteriores del cuartel de la Guardia Civil de Lerma (Burgos), sin causar victimas, aunque sí daños materiales.

El 5 de junio de 1994 la banda terrorista ETA lanzó dos granadas explosivas contra la casa cuartel de la Guardia Civil en Guernica (Vizcaya) sin causar consecencias personales ni materiales.

Esta acuartelamiento ya fue objeto de un atentado similar en 1987, en el que resultaron muertos dos agentes de la Guardia Civil.