El cardenal dijo en la homilía que pronunció en el funeral del magistrado José Franciso Querol y de su conductor, Armando Medina, que "es legítimo preguntarse si los creyentes y, en general, los ciudadanos y la sociedad española hemos sabid estar siempre al lado de las víctimas del terrorismo con aquella perserverancia y proximidad realista y generosa que demanda la conciencia a cualquier hombre de bien".

Asimismo, aseguró que "no hay ninguna idea, ningún programa o teoría política que valga una sola vida de una víctima del terrorismo" y añadió que la respuesta de la sociedad frente al terrorismo "no será sincera si no la traducimos en un cambio de conducta personal y colectivo".

El cardenal Rouco expresó su condolencia con los famliares de las tres víctimas mortales del último atentado de ETA y señaló que han sido sacrificados "por el odio y la vesanía terrorista".

El prelado dijo que José Francisco Querol fue un servidor de la justicia durante una "dilatada vida de servicio íntegro" y se refirió a Armando Medina calificándole como "un sencillo y probado servidor de la administración pública".