En su misiva, el responsable español de Transportes pide a su colega galo que no se hagan controles de documentación a los transportistas españoles mientras duren los incidentes, y que "si se hicieran, que se preste la obligada protección".

Asimismo, se hace eco de la indefensión de los camioneros españoles ante los ataques de agricultores galos, "más cuando observan como la policía francesa, en muchas ocasiones presente cuando se producen estas agresiones, adopta una actitudcompletamente pasiva".

Además del malestar de las autoridades españolas, Arias Salgado dice en su carta que "estos hechos, que desde ningún punto de vista pueden ser aceptados, se vienen riterando, de forma inexplicable, todos los años, y producen honda preocupación no sólo en las autoridades españolas, sino también en los transportistas, que se ven indefensos ante estos actos vandálicos".

Igualmente, Arias Salgado exige a las autoridades francesas que se adopten las medidas para "indemnizar con oda urgencia por los daños y perjuicios causados a los transportistas españoles, y para que los órganos competentes de orden público actúen con la debida diligencia, para que acontecimientos de este tipo no vuelvan a repetirse".