Esta provisión de fondos será gestionada por la organización internacional Unicef y se invertirá en la compra de 300 tiendas de campaña, mantas, colchas y mantones, lonas y cocinas para dar cobijo y atención a las familias afganas que han huido de l guerra.

La ayuda llegará tanto al interior de Afganistán, donde se han establecido varios campos de refugiados, como a los países limítrofes: Irán, Pakistán, Tayikistán y Uzbekistán.

Estos fondos han sido encauzados desde la partida de ayuda humanitaria que posee la Consejería de Bienestar Social, y cuyo fin es la aportación inmediata de dinero para paliar los efectos causados por catástrofes naturales o causadas por el hombre, que se produzcan en los países más desfavorecidos.

Esta ayuda pra los refugiados afganos fue anunciada hace pocos días por Tomás Mañas, quien destacó "la necesidad de paliar la situación de extrema necesidad que sufre la población afgana, causada por la guerra civil y agravada en estos momentos por el enfrentamiento con Estados Unidos y ante la inminente llegada del invierno .

Con esta nueva ayuda de emergencia son ya 121 millones de pesetas los que la Consejería de Bienestar Social ha destinado durante el presente año a mejorar la situación de las personas afectdas por catástrofes naturales ocurridas en países como El Salvador, India, Perú o Nicaragua.