Según recuerda ATA en una nota de prensa, uno de cada cuatro nuevos parados (más de 300.000) ha sido un autónomo.

"ATA no tiene nada que objetar a que se dé una nueva ayuda de 420 euros a los parados que se les haya agotado la prestación, incluso lo valora, pero muestra su rechazo a que se le niegue a un colectivo que ni siquiera ha tenido acceso a un solo mes de prestación por desempleo, y que ha sido, nuevamente, marginado", prosigue el escrito.

Por ello, considera que "se ha perdido una oportunidad histórica de hacer justicia con quienes durante años han construido nuestro país, han creado empleo y cohesión social - arriesgando su patrimonio y el de su familia- y que ahora, por culpa de la recesión, se han visto abocados a cerrar sus negocios y cesar sus actividades sin ningún tipo de protección ni ayuda".

Por otro lado, ATA denuncia que la nueva prestación por cese de actividad para los autónomos que ha diseñado el Gobierno supone una nueva discriminación para el colectivo, que tendrán que cotizar un año para tener tan sólo derecho a dos meses de prestación y un máximo de seis meses por 36 meses de cotización, mientras que a un desempleado asalariado le corresponde cuatro meses por año cotizado y 24 meses por 36 cotizados.

"Resulta paradójico", declara el presidente de ATA, Lorenzo Amor , que "hoy se amplíe en seis meses más la prestación para aquellos desempleados que ya la hayan agotado, algunos de ellos, tras 24 meses de subsidio, y se quiera contentar a los autónomos con una prestación media que no llegará a los 600 euros, y con una duración de un máximo de seis meses".