En una rueda de prensa en la sede central del PP, Astarloa denunció que "los ataques" a su partido en las calles de Madrid con motivo de la celebración de un Día del Orgullo Gay marcado por la aprobación del matrimonio homosexual demuestra que el PSOE "está manipulando de forma grosera" la postura del principal partido de la oposición.

Esta "instrumentalización" se realiza en "exclusivo beneficio propio, no por el interés general de todos los españoles", recalcó el dirigente del PP, quien aseguró que su partido ofreció resolver "pacíficamente" las uniones de parejas del mismo sexo con una propuesta que lograra el acuerdo político y social.

No obstante, prosiguió, el Ejecutivo socialista eligió una "confrontación cada día más hiriente para sacar tajada política y añadir más crispación y confrontación", para lo que "no tiene inconveniente en poner en entredicho el régimen de libertades y derechos básicos del Estado democrático".

LA DECENCIA

Puso como ejemplo la referencia del propio Rodríguez Zapatero en el Congreso a que ya vivimos en un país "decente", y le aclaró que en nuestro país "existe libertad de opinión, expresión y pensamiento, y tan decente es el del presidente del Gobierno como el de cualquier otro español".

Recordó otro incidente "lamentable" en la Cámara Baja, donde se increpó al ex ministro de Defensa y diputado popular Federico Trillo, sin que el Gobierno haya dado ninguna explicación, y a la "detención ilegal" de dos militantes del PP que participaron en la manifestación en la que supuestamente se agredió al ministro socialista José Bono.

Ante este "balance" que constata una "enorme operación de división y confrontación", advirtió Astarloa, "el PP no va a dar un sólo paso atrás en la defensa del régimen de libertades" ni en el rechazo a los socios del Gobierno que buscan "la ruptura de la cohesión social, política, territorial y, en definitiva, constitucional".