Scope, y otras organizaciones del ámbito de la discapacidad han recogido 50.000 firmas que apoyan esta petición, y las han entregado en la sede del Ejecutivo británico.

Con la ratificación de la convención, los países se comprometen a erradicar la discriminación motivada por la discapacidad, a combatir los estereotipos negativos de este colectivo, evitar los abusos y la explotación y promover la igualdad de derechos.

Aunque el Ejecutivo británico ha manifestado su intención de ratificar el tratado de la ONU antes de finales de año, algunos ministerios quieren quedar exentos del cumplimiento de algunos de sus aspectos.

Así, el Departamento de Defensa británico ha pedido ciertas excepciones en lo que se refiere a la participación de personas con discapacidad en las fuerzas armadas, y el Departamento para la Infancia, la Escuela y las Familias también ha reclamado quedar exento de determinados aspectos, para que puedan mantener los centros de educación especial para los alumnos con discapacidad que lo precisen.

Sin embargo, Alice Maynard, presidenta de Scope, se muestra en contra de estas excepciones y reivindica la ratificación y el pleno cumplimiento de la Convención de Derechos de las Personas con Discapacidad de la ONU.