Javier Martín, portavoz de UNAD, declaró a Servimedia que la decisión del Ejecutivo de aprobar una nueva estrategia antidroga para la próxima década es oportuna, porque el vigente plan aprobado en 1985 estaba "anticuado".

Para la UNAD, que agrupa a más de 300 ONGs dedicadas a las drogodependencias, el nuevo plan es especilmente positivo por la inclusión que hace del alcohol y el tabaco como una adicción más.

Martín destacó además el hecho de que el Gobierno haya consultado con las principales organizaciones sociales para la elaboración de esta estrategia.

La satisfacción de la UNAD con el plan no es total porque ve en el texto algunas sombras. La primera de ellas es que se sigue haciendo "una apuesta demasiado grande por la represión, en detrimento de la prevención".

Según Martín, este nuevo plan debería habr servido para que la droga dejara de depender del Ministerio del Interior, y pasara a Sanidad o Asuntos Sociales.

A la UNAD tampoco le gusta la figura del "agente policial encubierto" ni que no se hayan establecido criterios más definidos para el reparto de las subvenciones estatales.