Así consta en el escrito de acusación, de 195 páginas, que la abogada de la asociación, María Ponte, presentó hoy ante la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, que en los próximos meses tiene previsto celebrar el juicio contra los acusados de los atentados del 11 de marzo de 2004.

La asociación presidida por Pilar Manjón pedirá también que cada víctima de los atentados sea indemnizada con medio millón de euros.

A diferencia de la Fiscalía, esta asociación considera cooperadores necesarios para cometer los atentados, no sólo al ex minero José Emilio Suárez Trashorras, sino también a su cuñado, Antonio Toro, y a su mujer, Carmen Toro, y al confidente Rafa Zohuier.

La penas más elevadas que solicita esta asociación son para Trashorras (39.053 años de cárcel), para Zohuier y para Carmen Toro (39.049 años de prisión cada uno), mientras que la más pequeña es para Emilio Llano, para quien solicita 11 años de encarcelamiento.

Para cada uno de los presuntos autores intelectuales de los los atentados, Hassan El Haski, Youssef Belhadj y Rabei Osman El Sayed, alias "El egipcio", esta acusación pide 39.030 años de cárcel, mientras que para los que considera autores materiales de la masacre, Jamal Zougam, Besel Ghalyoun y Abdelmajid Bouchar, solicita una pena de 38.654 años de prisión para cada uno.

COAUTORÍA

Dice esta acusación que José Emilio Suárez Trashorras "conocía la radicalidad islamista de Jamal Ahmidan", uno de los presuntos autores de la masacre y uno de los siete terroristas que el 3 de abril de 2004 se suicidó en el piso de la calle Carmen Martín Gaite, en Leganés. El ex minero sabía también, según la asociación de Pilar Manjón, el destino que este hombre "podría dar a los explosivos por él suministrados".

En cuanto al confidente Rafa Zohuier, sostienen los letrados de la asociación presidida por Manjón, que "sirvió de enlace" a Trashorras y a Antonio Toro con el grupo de Jamal Ahmidan, "participando y lucrándose tanto del tráfico de sustancias estupefacientes como del tráfico de explosivos entre el grupo de Jamal Ahmidan y Suárez Trashorras".

"Conocía asimismo la estructura organizada con fines terroristas dirigida por Jamal Ahmidan y Sarhane Abdelmajid (otro de los suicidas de Leganés)", y sabía también "la intención de éstos de aprovisionamiento de explosivos para cometer atentados".

De Antonio Toro, afirma esta parte de la acusación que "intervino, en unión de José Emilio Suárez, en la venta de sustancias explosivas y detonadores al grupo de Jamal Ahmidan desde finales del año 2003".

Respecto a Carmen Toro, hermana de Antonio Toro y esposa de Jose Emilio Suarez Trashorras, los letrados de la Asociación 11- M Afectados del Terrorismo señalan que participaba "activamente" en las actividades delictivas de estos dos.

Según esta acusación, Carmen Toro era conocedora del tráfico de drogas y de explosivos en el que estaban inmersos su esposo y Jamal Ahmidan, y sabía también de la "ideologia radical" y violenta de éste.

"Las abundantes llamadas telefónicas en momentos clave del traslado de explosivos desde Asturias a Madrid ponen de manifiesto su directa implicación en la compra venta de explosivos y hachís al grupo de Jamal Ahmidan", añade el escrito de acusación de las víctimas.

Agrega que "Carmen Toro tenía pleno conocimiento de los viajes que su marido estaba organizando a Madrid transportando explosivos para la gente de Jamal Ahmidan".

AUTORES MATERIALES

En cuanto a los presuntos autores materiales de los atentados, el escrito de acusación presentado hoy afirma que Jamal Zougam pertenecía a la célula terrorista y proporcionaba tarjetas telefónicas para su uso por los terroristas.

Además, recuerda que "ha sido reconocido por un testigo como la persona que depositó debajo del asiento del tren que explotó en la estación de El Pozo, una bolsa de deportes color azul oscuro de nos cincuenta centímetros de longitud y unos treinta centímetros de altura, con asas y de unos 10 a 15 kilos", es decir, una de las mochilas-bomba.

No sólo eso, es que "también ha sido reconocido por otro testigo en el tren que explotó en la estación de Santa Eugenia", añade esta acusación.

En cuanto a Basel Ghalyoun, "tenía una relación estrecha y constante con los miembros de la célula que se suicidó en Leganés".

Además, "era partícipe de la voluntad del grupo, y especialmente la de Sarhane 'El Tunecino', de cometer atentados en España, y concretamente la comisión del atentado del 11 de marzo". Afirma esta acusación que "proporcionó al menos un terminal telefónico a los del grupo de Leganés".

Los letrados recuerdan que fue reconocido fotográficamente por un testigo protegido como usuario de uno de los trenes. Además, sostienen que fue uno de los portadores de parte de los explosivos empleados en los atentados.

Respecto a Abdelmajid Bouchar, el escrito de esta acusación mantiene que "participó directamente en los atentados" y recuerda también que "ha sido reconocido en rueda por un testigo como la persona que vio bajar en uno de los trenes en una estación" anterior a la de la calle Téllez".

EL PRIMER PASO

Pilar Manjón declaró en la puerta de la Audiencia Nacional que "hoy supone el primer paso hacia la búsqueda de la justicia" y aseguró que no van a contestar al "grupo de la teoría de la conspiración".

"Si yo hubiera tenido que estar desmintiendo mochilas azules, ácidos bóricos, pues no hubiera hecho este trabajo", agregó Pilar Manjón.

Asimismo, aseguró que "nunca" encontrarán a su asociación "insultando a nadie". "Seguimos creyendo en el poder judicial y alabamos el trabajo y la instrucción judicial", añadió.