Fuentes de ASIGC declararon a Servimedia que no se puede aceptar esta actitud por parte de agentes del Instituto Armado porque son actuaciones "míseras" que pueden afectar a la imagen del cuerpo.

Sin embargo, resaltaron que hay que "preservar la presunción de inocencia" de los agentes hasta que se demuestre su implicación en los hechos, y hasta que se determine el grado de participación de cada uno en la correspondiente sentencia judicial.

Una vez que el juez que instruye el caso decida sobre la imputación de los 19 agentes, 5 de ellos están encarcelados y el resto en libertad con cargos, se decidirá sobre la posibilidad de que se les abra un expediente en la Guardia Civil.

Fuentes de ASIGC informaron de que, si se les abre un "expediente gubernativo", a los agentes se les acusará de cometer una falta grave. Esta medida podría suponer la expulsión del cuerpo, si se les condena a más de 3 años, aunque, si es menor, se les suspenderá de empleo y sueldo, según estipulen las autoridades competentes.