Esta asociación acordó solicitar a los gobiernos de los países iberoamericanos potenciar los sistemas nacionales de Protección y Defensa Civil, mediante la promulgación de la normativa que resulte necesaria y la dotación de recursos materiales y financieros que permitan sus respectivas disponibilidades presupuestarias.

Asimismo se decidió fomentar la capacitación y formación específica de los recursos humanos dedicados a la defensa y protección civil, la introducción de las técnicas y métods de gestión de desastres a todos los niveles educativos y la extensión de la cultura de protección civil entre todos los ciudadanos.

Se detalla, asimismo, la necesidad de dar prioridad a las actuaciones de prevención y mitigación de desastres, asi como actuar prioritariamente en relación con los grupos especialmente vulnerables de la población.

Los países firmantes de los Estatutos de la Asociación Iberoamericana de Defensa y Protección Civil son: Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica Chile, España, Guatemala, Honduras, Mejico, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Portugal, República Dominicana, Uruguay y Venezuela.

La presidencia de la asociación ha recaído por votación mayoritaria en Alberto Maturana, director de la Oficina Nacional de Emergencias de Chile; la vicepresidencia será desempeñada por Juan San Nicolás Santamaría, director general de Protección Civil, de España.