Con este dinero, la AECC se compromete a mantener en funcionamiento las once unidades de cuidados paliativos existentes en la comunidad autónoma (una por cada una de las provincias castellanas y leonesas, a excepción de Salamanca y Valladolid, que cuentan con dos).

Esta subvención se enmarca en el convenio suscrito en julio de 2004 y con vigencia hasta finales de 2007, con el objetivo de colaborar en el diseño elaboración y establecimiento de una acción coordinada y complementaria conducente a proporcionar los adecuados cuidados paliativos integrados, en el marco sanitario, psicológico y social, al enfermo oncológico en fase terminal.

También a su familia dentro del propio domicilio y, si fuera necesario, también en la fase de ingreso hospitalario, de manera que los pacientes puedan mantener una adecuada calidad de vida hasta el momento de su fallecimiento.