En esta proposición no de ley registrada por los tres grupos de la izquierda (Más Madrid, PSOE y Unidas Podemos) se pretende elaborar, en el menor plazo de tiempo posible, el Plan Director para la Eliminación del Amianto en la Comunidad de Madrid, y realizar, con carácter de urgencia, un inventario de los centros educativos afectados por amianto en la región.

Asimismo, se pide incluir las obras y reformas correspondientes a estas actuaciones de retirada del amianto en la Estrategia de Reconstrucción y Resiliencia de la Comunidad de Madrid para su financiación europea con los fondos Next Generation UE e incluir las partidas suficientes para estas actuaciones.

La portavoz adjunta de Unidas Podemos, Alejandra Jacinto, dijo que le da "coraje" tener que estar defendiendo una iniciativa "tan evidente". "Estamos todos de acuerdo en el que el amianto es un asesino silencioso al acecho de nuestros hijos y cada día que no dedicamos a retirar el amianto en un colegio es un día más en el que ponemos en riesgo la salud de nuestros niños", señaló.

La parlamentaria del PSOE Cristina González afirmó que no hay "dosis mínima de exposición al amianto seguro", por lo que, "más allá de crear alarma social, hay que crear conciencia".

El parlamentario de Más Madrid Alejandro Sánchez consideró necesario retirar este material de las escuelas, por el riesgo que supone para los estudiantes y para el personal docente. "Es un tema de preocupación social. No hay un umbral seguro para el amianto y la respiración de las piezas pueden provocar cáncer", manifestó.

El diputado de Vox Jaime de Berenguer criticó que no admitiesen las enmiendas que han presentado, entre las que se encontraba pedir un plan nacional de desamiantado, pero afirmó que votan a favor "por coherencia" dado que han apoyado siempre iniciativas en este sentido.

Por su parte, la diputada de PP Miriam Rabaneda admitió que muchos edificios contienen este material, pero dijo que solo la presencia de este material “no indica directamente una situación de riesgo”.