A las seis dela mañana de ayer sábado se recibió en el 112 SOS Deiak el mensaje desde una clínica veterinaria de que una persona había accedido al interior tras romper el cristal de la puerta con una tapa de alcantarilla. El ladrón había salido huyendo, al ser sorprendido por el personal de guardia, dejando un pequeño reguero de sangre.

Cuando una patrulla de la Ertzaintza se dirigía al lugar, sito en la calle José María Ezcuza, otro particular informa que en la calle Sabino Arana un establecimiento presentaba rot la puerta de entrada y se oían ruidos en el interior. Ante la sospecha de que pudiera tratarse de la misma persona los agentes se presentaron en este lugar comprobando que un cristal de una tienda de cocinas estaba roto, al parecer con una tapa de alcantarilla que estaba en el suelo, y en el lugar había restos de sangre.

Tras acceder al interior descubrieron escondido en el cuarto de baño a M.W., argelino de 21 años y delincuente habitual, quien presentaba varios cortes sangrantes en ambas manos.

Los agentes procedieron a la detención del presunto ladrón, cuyos rasgos físicos y de vestimenta coincidían con el varón descrito por el personal de guardia del primer establecimiento. El arrestado fue trasladado a dependencias policiales a la espera de ser puesto a disposición judicial.