En declaraciones a Servimedia, Morón se refirió a la "prepotencia" de Arzalluz, que le empuja a realizar este tipo de demandas, y subrayó que la petición del presidente peneuvista responde a "un rebote político" al haber quedado su partido fuera del reparto de poderes del CGPJ.

En su opinión, lo que quiere Arzalluz es volver a los usos autoritarios de cualquier sistema dictatorial y su demanda tiene relación con el malestar tanto suyo como del PNV ante su ausencia en el Poder Judicial, de la que el pesidente del PNV pretende responsabilizar a la prensa y por extensión a los tribunales que, según él, no castigan como debieran a los periodistas.

"Tantos otros sectores de la sociedad se pueden quejar de la tardanza, del retraso en las sentencias o de que sus asuntos no son debidamente atendidos por la justicia, y no por ello a nadie se le ocurre proponer la creación de un tribunal especial del informático o de los usos médicos", indicó.