El presidente de CiU se pronunció de este modo en un ciclo especial sobre el Estatuto organizado por Nueva Economía Fórum con la colaboración de "The Wall Street Journal" y el patrocinio de Asisa y Assitència Sanitària Col-Legial.

Artur Mas dijo que, en lo que se refiere a autodeterminación, no está satisfecho con el nuevo Estatuto, porque "no cumple íntegramente los objetivos de la versión redactada en septiembre de 2005".

Por esa razón, apuntó que "las próximas generaciones serán las responsables de intentar lograr aquello que se quedó a medias". Sobre el tiempo de vida del nuevo Estatuto, el líder nacionalista no se atrevió a darle "más de 20 o 25 años de vida" y aseguró que si hubiera sido como el de septiembre, "no tendría problema en decir que duraría una generación entera".

Aun así, Mas declaró que el Estatuto "no es un yogur y no tiene fecha de caducidad y, por tanto, no es un producto perecedero", y dijo que su duración dependerá "de la lealtad con la que lo apliquen las partes que lo han suscrito".

Sobre el resultado de la negociación del Estatuto, indicó que "se subió el listón porque estaba claro que habría cesiones mutuas". "La propuesta de Estatuto de Zapatero sólo habría sido posible si éste hubiera sido redactado por el PSOE", añadió.

AUTONOMÍA

Según Mas, "Cataluña siempre ha tenido que diluir sus demandas para que éstas pudieran ser equiparables a las del resto de autonomías, pero ahora tenemos una nueva oportunidad".

El presidente de CiU reivindicó romper con "el café para todos" y dijo que "no es lo mismo el Estatuto catalán que el valenciano o el de Andalucía, y cuando otras autonomías se planteen otro estatuto, el nuevo modelo de financiación no será el mismo que el del Estatuto catalán".

En su opinión, "la autonomía debe ser para, todos pero se debe puntualizar qué tipo de autonomía", y añadió que "Cataluña tiene mucha más voluntad de autogobierno que otras autonomías del Estado que han sido inventadas a lo largo de los últimos treinta años".