En estos momentos, Mas reconoció a RNE que en su partido está "más bien fríos" en este terreno porque "de la colaboración que hemos tenido con distintos gobiernos españoles en los últimos diez años, creemos que a Cataluña no se la ha tratado con el respeto que se merecía, después de haber hecho algunas colaboraciones muy leales y muy de fondo".

No obstante, indicó que CiU apuesta por "estar en Madrid, participar en la política española y ser útil a nuestro electorado y a Cataluña" manteniendo una idea "global del conjunto de España" y apoyando al gobierno de tuno en cuestiones puntuales pero sin colaboraciones permanentes".

CiU sólo renunciaría a este planteamiento si se produce un "cambio radical" en el Gobierno central a partir de la aprobación del nuevo Estatuto de Autonomía por el Parlamento catalán y el diseño de un nuevo sistema de financiación.

En cuanto a la promesa hecha por el líder socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, de traer a las tropas españolas desplazadas en Iraq el 30 de junio, dijo que es "lógico" que quiera mantener ese compromso, aunque "otra cosa es si le va a ser más fácil o más difícil y qué tipo de repercusiones puede tener a nivel internacional y en las relaciones de España con algunos países muy preponderantes en el concierto mundial".