En la presentación de la campaña estuvieron presentes el presidente de Cáritas Española, José Sánchez Faba; el secretario general de la Conferencia Episcopal, monseñor Juan José Asenjo, y el director general de Cáritas Argentina, Eduardo Luis Serantes.

Monseñor Asenjo argumentó la necesidad de eta campaña a nivel nacional en la gran crisis económica, social y política que sufre "esta nación hermana" que, según dijo, precisa ayuda urgente. En este sentido, hizo un llamamiento a los sacerdotes para que pongan "toda la carne en el asador" para sensibilizar a los fieles y que estos cooperen en la colecta del domingo 24 de febrero.

Para esa fecha las estimaciones de la Iglesia son conseguir recaudar al menos 1.000 millones de pesetas. Teniendo en cuenta que el día del Corpus Cáritas recauda 6.000millones de pesetas, "sería un fracaso que no recaudáramos al menos 1.000 millones de pesetas", aseveró Asenjo.

Por su parte, el presidente de Cáritas Española anunció el envío inmediato de 100.000 dólares a Cáritas Argentina. También hizo público el número de teléfono de ayuda al que puede llamar todo aquel que quiera colaborar, el 902 33 99 99.

La campaña, explicó Sánchez Faba, debe servir para sensibilizar al pueblo español y al Gobierno español "para que se mueva activamente" y apoye las petiiones de Cáritas Argentina, en el sentido de renegociar la deuda externa y otorgar mayor permisividad para el comercio.

19 MILLONES DE POBRES

Por último, el director de Cáritas Argentina puso de manifiesto la realidad que se está viviendo en el país. Según dijo, de los 36 millones de habitantes, 19 millones se encuentran por debajo de la línea de pobreza, que significa tener un ingreso mensual menor de 400 pesos, (240 euros).

Asimismo, advirtió del crecimiento de la desocupación, que ha pasado n sólo un mes del 20% registrado en el 2001 al 23%. Esta situación afecta, fundamentalmente, a pobres, mujeres y niños y varía según las regiones, algunas de las cuales llegan a tener hasta un 40% de paro.

En el nivel asistencial, Cáritas Argentina ha pasado de atender a un millón y medio de personas en todo el año anterior a unas 500.000 personas en el primer mes de crisis. Con todo ello, explicó Eduardo Luis Serantes, la labor asistencial de Cáritas se ha convertido en la primera tarea de la asociacón.

"El país se ha paralizado y pide ayuda exterior", aseveró. En este sentido, el director de Cáritas Argentina pidió una renegociación de la deuda y una mayor liberalización del comercio para mejorar la actividad económica del país.

En este llamamiento a la ayuda internacional, Cáritas Argentina hizo especial hincapié en España, por motivos de hermandad y también por ostentar este semestre la presidencia europea. "Esperamos que el pueblo y el Gobierno español colabore con nosotros. Nosotros garntizaremos la transparencia y el buen uso de cada euro, y nos comprometemos a rendir cuentas", concluyó Serantes.