Arenas, que hizo estas declaraciones tras participar en el acto de la toma de posesión de Federic Durán como presidente del Consejo Económico y Social (CES), contestó así a Cándido Méndez y Antonio Gutiérrez, que esta mañana exigieron al Ejecutivo que estas bonificaciones se compensen vía Hacienda, con el fin de mantener el equilibrio financiero de la Seguridad Social, pero en ningún caso a través de recursos del Inem.

El titular de Trabajo no quiso concretar en cuánto se reducirán las cotizaciones sociales de los empresarios para los nuevos contratos fijos que nacen de la reforma laboral, pero aeguró que "ninguna política activa de empleo ni el presupuesto del Inem se van a ver condicionados negativamente por las bonificaciones".

Arenas explicó que no se va a producir ninguna modificación en el sistema actual de incentivos a la contratación, en el que ya existen bonificaciones a la Seguridad Social, y que la intención del Gobierno es reordenar todos los incentivos, eliminando las subvenciones a los contratos temporales y dirigiendo los incentivos hacia los contratos indefinidos.

El minitro insistió en que en 1997 no se va a producir ninguna modificación presupuestaria, porque "como he dicho por activa y por pasiva, vamos a reordenar los incentivos". Agregó que cuando habría que plantearse modificaciones presupuestarias sería en el ejercicio de 1998, "y eso no va a suponer nunca una merma ni de las políticas activas de empleo ni del presupuesto del Inem".

Arenas no quiso explicar de dónde procederían los recursos en el supuesto de que se necesiten más que los que actualmente se destian a incentivos a la contratación, y se limitó a decir que "lo pagaría el Estado", pero sin concretar si vendrían de Hacienda o la Seguridad Social.

El ministro de Trabajo confirmó que el decreto ley sobre la reforma laboral se aprobará en el Consejo de Ministros del viernes y entrará en vigor al día siguiente, pero no aseguró que en ese mismo Consejo se apruebe el decreto ley sobre incentivos a la contratación, que podría ir al de la semana que viene.

Arenas aprovechó también para felicitar al gupo parlamentario del PSOE porque haya recapacitado y haya decidido finalmente apoyar la tramitación de la reforma laboral negociada entre empresarios y sindicatos como decreto ley.