Montones de cajas, donde se guardan los documentos y archivos policiales, se apilan hasta el techo del local en espera de la instalación de nuevas estanterías.

El problema má grave que padecen los agentes es el de las comunicaciones, ya que sólo disponen de un teléfono directo y la señal de la emisora que utilizan para comunicar por radio no llega hasta el semisótano, donde están ubicadas las dependencias policiales.

Hasta el momento, sólo poseen una pequeña antena interior que interfiere el ordenador si se acerca demasiado a la emisora central.

Por otra parte, debido a la carencia de calabozos o de un habitáculo similar, cuando los agentes locales realizan algún arrsto los detenidos tienen que ser trasladados a las dependencias del Cuerpo Nacional de Policía. En esta instalación tampoco existe cristal protector ni material de oficina suficiente, según las mismas fuentes.

Otra dificultad añadida que presenta la nueva sede es la falta de aparcamiento para los coches-patrulla, lo que obliga al policía de servicio a estar vigilante para mantener libre los accesos a la jefatura.

Este emplazamiento, situado en la calle de Las Norias, fue elegido por ser también l futura sede del edificio que albergará a los juzgados de instrucción y primera instancia de Majadahonda, que provisionalmente se encuentran en un local alquilado de la calle Las Mieses.