En declaraciones a Servimedia, el consejero aragonés de Cultura, Javier Callizo, denunció las "presiones" que está haciendo la Administración catalana para que la diócesis de Lérida no devuelva un centenar de bienes que recibió con carácter de depósito de las parroquias orientales de Aragón (de la "Franja Ponent" en la denominació catalana).

El contencioso arrastra desde hace años y la máxima instancia del Vaticano, la Signatura Apostólica, ha fallado en favor del obispado aragonés en varias ocasiones.

"La diócesis de Lérida acató inicialmente la sentencia, pero ante las presiones de las Administraciones catalanas, ha presentado nuevos recursos", afirmó Callizo.

El Ejecutivo aragonés espera que el caso se cierre pronto de modo definitivo y no quiere entrar en el conflicto del Archivo de Salamanca, pero sostiene que n cabe establecer paralelismos entre la reclamación catalana y la de su región.

"En nuestro caso, está claro que se trata de un depósito y eso significa que cuando alguien reclama algo que es de su propiedad, debe devolverse", observó Callizo.

"Deberían dejarse de maniobras dilatorias", añadió, "y aceptar civilizadamente que está bien reivindicar lo que es de uno, pero que no hay que empeñarse en quedarse con lo ajeno".