En un auto al que ha tenido acceso Servimedia, el juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 7 de Leganés acuerda archivar el caso y negar las diligencias que respecto a la querella habían solicitado tanto Calderón como el periodista.

En la resolución, se afirma que la primacía del derecho de la información y la certeza de que Palacios realizó gestiones para tratar de lograr una "información veraz" llevan a archivar las actuaciones, siguiendo con ello la doctrina fijada por el Tribunal Cnstitucional.

El juez, a este respecto, acepta la argumentación de periodista de que decidió escribir este libro con el propósito de "servicio a la verdad histórica", al haber quedado "cerrado en falso" el asunto del golpe de Estado del 23-F con el llamado juicio de Campamento.

Además, el auto destaca cómo el informador ha declarado que consultó "múltiples documentos" para elaborar su obra, algo que el titular del juzgado número 7 considera que "fácilmente se constata con una simple lectura del lbro, procurando su autor identificar, con las notas marginales, sus fuentes, al margen su asistencia a la vista del proceso".

El juez sostiene que su papel consiste en comprobar que Palacios realizó esta labor de investigación, pero no "valorar si el general Calderón dirigió o no el golpe de Estado". Esto lleva también al juzgado a rechazar la práctica de diligencias, puesto que éstas no pueden convertirse "en una segunda edición del juicio militar".