El juez optó por cerrar el caso una vez concluidas, sin resultado, todas las investigaciones judiciales y policiales desarrolladas al efecto.

El magistrado Jaime Estrada aclaró que su determinación no impide que las diligencias puedan volver a abrirse cuando los investigadoires encuntren una pista o datos que puedan conducir al paradero del médico coruñés.

Fernando Cuadrado Conejo, casado y con tres hijos de corta edad, desapareció el 29 de diciembre del año pasado, sin dejar rastro.

Estaba considerado como una persona católica de gran religiosidad, que desarrollaba una vida normal en el vecindario y en su trabajo. Es presidente de la Asociación Pro Vida de La Coruña.

L última vez que le vieron los vecinos fue cuando regresaba de hacer unas compras en un supermercado crcano a su domicilio familiar.

Desde entonces, familiares, vecinos y policías barajan diversas hipótesis sobre el suceso: desde el suicidio, hasta un secuestro por error, pasando por un abandono voluntario de su hogar.

Ni las indagaciones policiales y judiciales, ni las numerosas gestiones desplegadas por la familia, incluidos varios reclamos publicitarios en la prensa local y regional, han servido hasta la frecha para arrojar la menor luz sobre el caso.