Para conseguir este objetivo, el acuerdo establece un articulado que contempla el entorno económico y la evolución del sector siderúrgico, la demanda sindical de reducción de la jornada a 35 horas semanales y el nuevo marco empresarial creado como consecuencia de la integración en el Grupo Arcelor.

El convenio, vigente hasta el 31 de diciembre de 2008, establece un incremento salarial equivalente al IPC real de cada uno de los tres años, más un 0,7% para este año, un 0,6% para 2007 y un 0,4% para el año 2008, además de una prima ligada a objetivos y no consolidable del 2% para este año, del 2,5% para el año 2007 y del 3% para 2008.

En cuanto a la jornada laboral, el pacto establece una reducción de 16 horas, a razón de 8 horas en el año 2007 y otras 8 en 2008, para el personal cuyo régimen de trabajo se denomina T4 y T5.

Según los sindicatos, el acuerdo avanza en el objetivo de rejuvenecer las plantillas del grupo, al mantener el contrato de relevo durante los tres años de vigencia del mismo, lo que va a permitir que un número importante de jóvenes puedan integrarse en la compañía.

Además, el pacto da prioridad a la seguridad y salud de los trabajadores con el objetivo de eliminar los accidentes. Además, se ha creado una Comisión de Formación encargada de analizar los planes de formación, sus objetivos y la calidad de los mismos.

En el ámbito de las relacionales laborales, el acuerdo prevé la aplicación de un procedimiento para la solución en el seno de la empresa de los conflictos de trabajo, utilizando los mecanismos de participación previstos a todos los niveles.