Los criterios establecidos comprenden la evaluación de los recursos agrarios y e los sistemas de producción, las propuestas de las comunidades autónomas, la distribución territorial de los cultivos y los planes de orientación plurianual pesqueros, entre otros.

La mayor parte de los fondos (11.400 millones) se emplearán para las producciones agrícolas, ganaderas y de defensa sanitaria, mientras que otros 4.150 millones serán utilizados en la promoción de la industria agroalimentaria.

Con menor cuantía, se dedicarán a la prevención de incendios forestales 2.100 millones, otro 700 en fomento de la acuicultura y 300 millones más en recogida de información para un plan estadístico.

Las ayudas previstas serán destinadas en concreto al fomento de la mecanización del cultivo y recolección del algodón, a la promoción de nuevas tecnologías en maquinarias agrícolas, a la reconversión de los viñedos, al fomento de la producción forestal y a las agrupaciones de defensa sanitarias.