Esta decisión procede de la legislación vigente que, a través de la Ley Orgánica de Calidad de la Educación de 23 de diciembre de 2002, determina en su artículo 8 que, en relación con las enseñanzas reguladas por la ley, el Gobierno fijará los contenidos comunes que constituyen los elementos básicos del currículo, los cuales deberán respetar los porcentajes establecidos con carácter general en el propio artículo.

Este real decreto trata los siguientes idiomas: alemán, árabe, chino, danés, español para extranjeros, finés, francés, griego, inglés, irlandés, italiano, japonés, neerlandés, portugués, rumano, ruso y sueco, así como las lenguas cooficiales del Estado.

La implantación del nivel básico de las enseñanzas de idiomas está prevista para el comienzo del curso 2005-2006, de acuerdo con el calendario de aplicación fijado en el real decreto de 27 de junio de 2003.