Entre los presentes, figuran los portavoces de todos los grupos parlamentarios, entre ellos el líder de la oposición, Mariano Rajoy, además de un buen número de representantes del Gobierno.

Entre los miembros del Ejecutivo, la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega; junto a Miguel Ángel Moratinos (Asuntos Exteriores y Cooperación), Juan Fernando López Aguilar (Justicia), José Antonio Alonso (Defensa), Joan Clos (Industria), Mercedes Cabrera (Educación), y Jordi Sevilla (Administraciones Públicas).

La primera anécdota del debate la protagonizó el propio vicepresidente segundo del Gobierno, después de que Manuel Marín, presidente del Congreso, explicara que el debate no se pararía a mediodía. "Eso quiere decir que no comemos", dijo Solbes según subía a la tribuna de oradores, frase captada por el micrófono del propio Marín.

Otra anécdota destacada, en una jornada de intensa lluvia en Madrid, fue el intento de la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, de entrar en el Congreso con un voluminoso paraguas, que se quedó bloqueado al intentar franquear la verja que separa la calle del patio. De la Vega tuvo que cerrar su paraguas para atravesar la entrada al Congreso, y después abrirlo para seguirse protegiendo de la lluvia.