San José, que participó en el curso "Los retos de la información social: el periodismo, articulador de las nuevas políticas sociales", organizado por Servimedia en el marco de los Cursos de Verano de la Complutense, subrayó que aunque este tipo de contenidos no estén socialmente bien vistos, "los audímetros no mienten".

En este sentido, el periodista recalcó la rentabilidad económica que la denominada "televisión basura" tiene para las televisiones privadas. "La televisión privada es una empresa, lo que supone una actividad comercial y la obligación de presentar un balance de cuentas saneado", dijo.

El ponente relacionó la importancia de los ingresos publicitarios con el crecimiento de la audiencia. "A más audiencia, más publicidad, y más cara", dijo San José, que responsabilizó a este principio del hecho de que "corran malos tiempos para la lírica de lo social".

"Los valores ya no existen, lo que importa es el triunfo fácil y ganar dinero", dijo el director de Informativos de Canal+ y CNN+, que expresó su preocupación por la tendencia de los jóvenes a considerar a los protagonistas de los programas de telerrealidad como "iconos sociales".

Pese a estos aspectos negativos de la televisión, recordó que los medios de comunicación han servido como impulso de políticas sociales para que las minorías "no se queden en el limbo del olvido". En esta línea, destacó la labor de los programas informativos para conseguir "que este país comprendiera que pegar a una mujer es un delito".

"La televisión no deja de ser un espejo de la sociedad actual y los periodistas tienen la obligación y la responsabilidad social de reflejar la realidad", dijo.

Finalmente, Antonio San José instó a los profesionales de la comunicación a ser más valientes a la hora de apostar por la información social, aunque no venda. Asimismo, les animó a recuperar la sensibilidad y la deontología periodística para dejar de lado los malos hábitos de algunos programas televisivos que sobrepasan las fronteras de la intimidad de las personas.