El libro galardonado, "Sangrefría", es un relato sobre el mundo taurino, que se sirve de los personajes típicos de los ruedos para plantear una reflexión sobre la existencia humana, a través de la evocación que realiza Pedro Calvete, ex matador de toros, de su amigo Manolo, que también fue una figura del toreo.

"En la plaza hay tragedia y se canta al héroe, y ese es exactamente el espíritu que alienta mi obra, como ocure con otras novelas ambientadas en ese mundo", señaló Hernández, coincidiendo con el sentir del jurado del premio, que ha considerado a "Sangrefría" como "una valiosa renovación temática".

El jurado que concedió el premio a Hernández, que estuvo presidido por el escritor Antonio Muñoz Molina, destacó también "la alta calidad del lenguaje y la certera aproximación a los entresijos del mundo taurino".

Por su parte, el periodista Raúl del Pozo afirmó en la presentación de la novela que "mientras esaba leyendo el libro, me recordaba al Madrid canalla, lleno de pícaros, que retrató Baroja en 'La Busca'".