Antich explicó en Madrid, en un desayuno organizado por la agencia Europa Press, que Baleares se encuentra 24 puntos por debajo de la media nacional en renta per cápita, situación que la coloca como la región española peor financiada y que es de todo punto insostenible para el archipiélago.

"Es importante reconocer que el actual sistema ha dejado a Baleares como la comunidad más perjudicada con diferencia. Somos los que aportamos más y los que recibimos menos", insistió el presidente balear, quien subrayó que esto hace que puedan invertir menos dinero que otras comunidades en servicios básicos, lo cual les está afectando en gran medida.

Por tanto, hizo un llamamiento a la "equidad" y la "transparencia" en el próximo debate sobre financiación autonómica, considerando las variables de la demografía insular, ya que la población ha crecido un 25% entre 1999 y 2008.

Antich defendió que Baleares ha de ser una comunidad solidaria con el resto de España, pero no a costa de que su sistema se resienta. "Lo cierto es que la solidaridad que estamos aportando la estamos quitando de los servicios básicos de nuestra gente", aclaró.

En cualquier caso, cree que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero entiende la situación de desventaja del archipiélago, lo cual "nos hace ver con esperanza" el debate sobre la financiación. El máximo responsable del Ejecutivo balear quiso también dejar claro que ese debate no debe girar en torno a comunidades pobres y ricas, sino a regiones bien y mal financiadas.

Antich pidió que se reconozca la situación de desigualdad del archipiélago y que con el nuevo sistema de financiación se resuelvan los problemas que tiene, porque Baleares ha salido muy perjudicada en el apartado de inversiones por parte del Estado.