Lo que está pasando en RTVE puede ser "peligroso", advirtió en los pasillos del Congreso, porque se intentó "desviar" la atención de los ciudadanos sobre un tema de gran "trascendencia política" para relacionarlo con el "caso Gal". Conde añadió que los directivos de RTVE no deben estar al servicio de "los conspiradores".

Frente a la denuncia de una "conspiración para derribar a unpresidente legítimamente elegido", los informativos de TVE "tergiversaron" las declaraciones de algunos líderes políticos, como la "dura reacción" del presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, insistió Conde.

Es "muy preocupante", prosiguió, que durante todo el día del domingo, todos los medios de comunicación difundieran las declaraciones de Luis María Ansón, mientras que TVE presentaba al vicepresidente del Gobierno, Francisco Alvarez Cascos, "una de las personas estrechamente relacionadas con estaoperación de acoso y derribo", tomando un cocido en la localidad gallega de Lalin y "dando un discurso sobre su bonanza".

Tras elogiar la calidad profesional de los trabajadores de la cadena pública y destacar la imposibilidad de que no fueran "conscientes de la importancia de esta noticia", concluyó que su actitud se debió a la existencia de "una orden".

Por ello, recordó a los responsables de RTVE que el ente es un "servicio público para todos los españoles" y no sólo para "los conspiradores",les advirtió que tendrán que explicar su comportamiento ante el Parlamento.