A jucio de este experto, adoptar un animal de compañía puede resolver muchos problemas, tanto del niño discapacitado como de los padres. "A menudo, los niños con discapacidades físicas o psíquicas se sienten infelices, son emocionalmente inmaduros, se preocupan sólo de sus problemas personales y les parece que nadie en el mundo es tan desgraciados como ellos. Se sienten inferiores y, a causa del exceso e protección por parte de sus padres, se encuentran incapaces de lograr incluso los objetos que están a su alance".

En España hay diferentes proyectos puestos en marcha en los que se trabajan con delfines, caballos y perros, además de con pequeños afectados por algún tipo de discapacidad.

Los equipos formados por psicólogos y pedagogos estudían la evolucón de estos niños a corto y medio plazo y los posibles beneficios a nivel mental, motriz y social de los pequeños.

Lo importante de estos proyectos, según los expertos, es estimular al niño de una forma natural y conseguir que el periodo de aprendizje de la codnucta no sea tan largo. Además, es importante este tratamiento como trampolín para una mejor relación con los médicos y psicoterapeutas que luego tendrán que tratar al niño, "ya que el pequeño aprende a querer y a cuidar al animal, y eso puede despertar una relación normal con las cosas que le rodean".

Recientemente, dos niños autistas participaron, y evolucionaron favorablemene, en el avance del programa científico que se desarrolló en el delfinario del parque de agua "Octopus" de la play de San Juan (Alicante).

La experiencia pretendía estudiar el comportamiento de los niños autistas cuando se les pone en contacto con los delfines, los resultados, según los expertos, fueron "muy positivos".

También este tipo de programas, que unicamente se han llevado a cabo en Tenerife, Mallorca, Cadaqués (Gerona) y Alicante, se han experimentado con niños ciegos, deficientes psíquicos, y niños con síndrome de Down, y los animales que se han utilizado hasta ahora han sido delfines, caballos y prros.