Esta medida, en la que se invertirán 3,6 millones de euros, permitirá que los animales, sobre todo los linces ibéricos, se desplacen por la zona con lugares seguros para cruzar la carretera, lo que contribuirá al plan de conservación y reintroducción de esta especie en Andalucía.

Estos proyectos son parte de las acciones realizadas por Obras Públicas en el marco del Programa LIFE 2006-2011 y se llevan a cabo con el asesoramiento de la Consejería de Medio Ambiente, que se encarga de desarrollar el plan.

En cuanto a su localización, dos de los pasos, que irán bajo la calzada y tendrán 7 metros de anchura por 2,5 de altura, se ubicarán en la carretera A-494 de Matalascañas a Mazagón. Los otros dos, que serán superiores, se construirán en la A-483, de El Rocío a Matalascañas.

Estos pasos superiores, también denominados "eoductos", tienen una anchura de más de 15 metros y, una vez construidos, se cubren de tierra y plantas para adaptarlos a su entorno natural y se aíslan con vallas opacas para evitar que los animales vean y oigan el tráfico.

En su tarea de adaptar las carreteras de Doñana al hábitat del lince ibérico, la Consejería de Obras Públicas ya ha finalizado otros proyectos en estas carreteras, como el vallado de la A-483 o la construcción de otros tres pasos de fauna en la A-494, y tiene en proyecto otras acciones en el entorno del Parque Nacional.

Entre ellas, se prevé adaptar los drenajes o tuberías que existen bajo las carreteras para que los animales también puedan atravesarlos, recubriendo de vegetación las embocaduras de los túneles, instalar catadióptricos en la calzada para señalizar las zonas de paso de fauna, desbrozar los márgenes de la vía para facilitar la visibilidad de los conductores y vallado de las carreteras.